La vuelta a la rutina puede ser un desafío para mantener una alimentación saludable. Aquí tienes algunos consejos para enfrentarte al regreso a la rutina y recuperarte con éxito:
1. Planifica tus comidas con tiempo:
- Establece un menú semanal: Dedica 10-15 minutos a la semana para planificar las comidas y cenas de toda la semana. Esto te ayudará a evitar decisiones impulsivas y a asegurarte de que todas las comidas sean equilibradas.
- Haz una lista de la compra: Basada en tu menú semanal con la lista de los ingredientes que necesitas o con los alimentos que consideres que son importantes para elaborar tus platos semanales. Esto te ayudará a evitar recurrir a alimentos precocinados o de mala calidad por no tener en casa los alimentos que necesitas.
2. Incluye todos los grupos de alimentos:
Esto te ayudará a mantenerte saciado y que tus platos de comida sean completos.
- Proteínas de calidad: Incorpora proteínas en cada comida, ya sea de origen animal (pollo, pescado, huevos) o vegetal (legumbres, tofu).
- Grasas saludables: Incluye grasas saludables como aguacate, frutos secos, semillas o aceite de oliva virgen extra.
- Verduras y frutas: Incluye en tus platos de comida y cena una ración de verduras. Busca opciones de verduras preparadas (congelada, microondas…) si te cuesta mucho añadirlas a tus comidas. Asegúrate de tener en casa fruta para tomar como snack o postre.
- Hidratos de carbono complejos: Ten a mano alternativas de hidratos de carbono complejos como cereales integrales, legumbres o tubérculos para añadir a tus comidas.
3. Opta por snacks saludables:
- Ten opciones saludables a mano como fruta, lácteos naturales, frutos secos naturales, chocolate negro…
4. Controla las porciones:
- Prepara la cantidad que necesitas: ten en cuenta la cantidad que necesitas de cada grupo de alimentos a la hora de preparar tus platos.
- Cocina para varios días, teniendo en cuenta estas porciones
5. Mantén un equilibrio
- No es necesario que te prives: Incluye tus alimentos favoritos de vez en cuando, no hace falta hacer restricciones, la clave está en la moderación.
- Haz alguna comida social a la semana: donde no sigas una alimentación 100% perfecta, pero te permita disfrutar de otro tipo de comidas con gente cercana.
6. Flexibilidad
- Adáptate según tu día: Si un día no puedes seguir el plan exactamente, no te preocupes. La consistencia a largo plazo es lo que importa.
¿Necesitas ayuda con tu nutrición y tu dieta en tu regreso a la rutina?
Estaremos encantados de hablar con vosotros o de que solicites información sobre nuestros planes de asesoramiento en Nutrición.